Boca campeón: la hora de festejar tras un campeonato largo y agitado
Pese a no contar con una columna vertebral, con numerosas variantes tácticas y de nombres, fue el equipo con más victorias y más goles convertidos
Interminable. Así le resultó a Boca este torneo de primera división de 30 fechas y 296 días, que comenzó allá lejos y hace tiempo, el 28 de agosto de 2016. Incluidos casi tres meses de receso en el verano, como consecuencia de la huelga impuesta, por falta de pago, por Futbolistas Argentinos Agremiados, el que se termina es el campeonato más largo del siglo para el fútbol argentino. Y vaya si se notó.
Además de la habitual obligación de ser protagonista en cada torneo que juega, a Boca se le sumó una presión extra en este 2017. El hecho de haber quedado al margen de competencias internacionales lo catapultaron automáticamente a ser el máximo candidato al título, y eso es algo que por momentos fue difícil de sobrellevar. Sin participación en la Copas Libertadores y Sudamericana, hubiera sido complicado para el club, para el plantel y para el cuerpo técnico no lograr este campeonato, el número 32 en el plano local, y su estrella número 66 en todo concepto.
La consagración llegó antes de jugar contra Olimpo. Curiosamente, el camino comenzó con una derrota. En la Fortaleza, Lanús le refregó en la cara a Boca su condición de campeón vigente del fútbol argentino. Y si bien el resultado fue ajustado (1-0), lo exhibido en el campo marcó una diferencia más amplia entre un equipo ya conformado y otro aún en ablande. El estreno del nuevo dibujo táctico (4-2-3-1), en teoría implementado para potenciar a Carlos Tevez, no convenció a nadie. Incluso, el Apache se mostró incómodo y hasta deslizó críticas contra Benedetto, por desaprovechar un par de situaciones claras para convertir.